Durante dos décadas el personal de CSERC ha eregido estaciones de detección fotográfica para obtener pruebas de fotos de animales raros y esquivos.
Durante años de trabajo realizado en colaboración con biólogos del Parque Yosemite y el Bosque Stanislaus, nuestro personal ha sido mimado con resultados excelentes. No hacemos caso de fotos de osos madres con oseznos, ardillas, liebres raquetas de nieve, venados y aves comunes. Incluso los gatos cola de anillo, pumas y linces sólo generan emoción a corto plazo. Las especies raras que buscamos son las más esquivas como marta Americana, pekan del Pacífico, zorro rojo de la Sierra Nevada y carcayú. Una vez más este invierno hemos estado eregiendo y manteniendo cámaras en el Parque Yosemite. Pero los resultados han sido altamente desconcertantes. Con series de cuatro cámaras con cebo funcionando a tiempo completo desde los principios de enero, nos ha sorprendido que muchos sitios no tenían ningún animal atraído por el cebo entre visitas semanales. Mantequilla de cacahuate, anillos de cacahuate y “pollo en un calcetín” no impulsaron ninguna visita de especies hambrosas. En una cámara, ni un solo animal vino durante todo el mes. El cebo fresco de cada semana salió intacto a pesar de aromas atrayentes acres que pueden atraer animales de largas distancias. Durante más de dos décadas de CSERC haciendo encuestas de foto de vida silvestre, nunca hemos tenido pocas especies visitar el cebo.
¿Qué son las razones posibles para la falta inusual de vida silvestre? Primero, muchos sitios que hemos examinado en el Parque se han ubicado en áreas quemadas a una severidad moderada a alta dentro del Incendio Rim. Tenían pocos tapizantes, arbustos, o comida o refugio– sólo un montón de tocónes en medio de árboles dispersos supervivientes. El hábitat era claramente deficiente. Una segunda razón posible es la sequía. Después de cuatro años secos, hay menos vegetación para beneficiar presa que luego beneficia a depredadores. Especies de presa que forman la base de la cadena alimentaria fueron notablemente ausentes. Con cuatro cámaras cebadas, sólo dos ardillas se detectaron durante más de un mes. A mediados de marzo, la primera familia de osos surgió para devorar el cebo en una estación. En la foto arriba, un lince fue fotografiado mientras se agachó precariamente en una rama delgada para olfatear el cebo de pollo en el calcetín. Pero en general los efectos de la sequía y el incendio parecen haber reducido notablemente la diversidad de vida silvestre y números de vida silvstre. Ahora que nuestro personal ha cambiado a áreas no quemadas para dos de nuestros nuevos sitios, esperamos más fotos de animales. Si los resultados son todavía anormalmente bajos, incluso en sitios no quemados, es más probable que la sequía será el factor clave.